SE REPARARON DE EMERGENCIA LAS DOS LÍNEAS DE ALTA TENSIÓN DE EPEC QUE ALIMENTAN LA REGIÓN

20 días fuera de servicio permaneció una de ellas. Provocó sobrecarga en la otra e interrupciones eléctricas. EPEC había reconocido fragilidad en la distribución. La infraestructura actual es más vulnerable a tormentas.

Desde el 22 de Diciembre las dos líneas de EPEC que distribuyen energía en Alta Tensión -66.000 V- a la región operan normalmente, aunque con una infraestructura más vulnerable a inclemencias climáticas, debido a que fueron reparadas de emergencia respecto al deterioro que sufrieran en sus cables y en más de 35 postes por el temporal del 2 de dicho mes.
Es decir, durante 20 días el Sistema de Distribución Eléctrica Regional estuvo condicionado, con fallas en su funcionamiento e interrupciones energéticas programadas e imprevistas, debido a que la Línea Pilar - Santiago Temple estuvo fuera de servicio, sobrecargando el otro ramal Arroyito - S. Temple, que fuera restablecida por primera vez el 4 de diciembre (ver “cortes del mes”).
El aumento en la temperatura y el récord de consumo empeoraron el escenario, reprogramando tareas permanentemente de acuerdo a las urgencias.
A través de su vocera Mariana González, EPEC había calificado la situación como “frágil”, debido a que la línea Pilar - Temple “asegura la estabilidad del sistema, la que permite que ante cualquier cuestión menor no sea necesaria la interrupción (del servicio)”, según precisara.
En este contexto, la región (ver localidades afectadas) estuvo 35 hs. sin luz luego del temporal, y otras 22 hs sin servicio eléctrico a partir del 8 de Diciembre, cuando una nueva tormenta volvió a tirar los postes de emergencia que se estaban colocando en las líneas de EPEC.